Marta Domínguez acusada de traficar con sustancias controladas. Doping y política. Protagonistas Sevilla. Punto Radio. Martes 14 de diciembre de 2010.

Según nuestro diccionario de la Real Academia Española de la lengua, dopar se define como:

(Del ingl. to dope, drogar).

1. tr. Dep. y Med. Administrar fármacos o sustancias estimulantes para potenciar artificialmente el rendimiento del organismo con fines competitivos. U. t. c. prnl.

2. tr. Electr. Introducir en un semiconductor impurezas con el fin de modificar su comportamiento.

Dejando de lado la acepción número dos, que no hace al caso salvo que nos encontremos con un claro enchufe, si nos centramos en la primera acepción, podemos comprobar que se trata de un concepto bipartito entre su consistencia, estimularse y su finalidad, potenciar artificialmente. Reparemos en ello: Se supone que lo penado en el hecho de doparse, no es la administración de fármacos en sí, puesto que en otros casos tales fármacos y tal administración son completamente legales. Lo penado, hemos de deducir, es el objeto al cual alguien o alguian se dopa, cuyo es, engañar al personal y modificar los resultados de cualquier competición obteniendo ventajas sobre el resto de los competidores, se consiga ganar o no.

Y digo yo, ¿no es esto exactamente lo mismo que ocurre con las promesas políticas? Si dan un repasito, en las campañas nos estimulan a nosotros, que somos el organismo de la democracia con infinidad promesas que luego se revelan artificiales y falsas, y lo hacen con el fin de coger ventaja en la competición electoral. Un buen redactor legal podría dar forma y tipificar como delito el dopin electo-político para que si se quedan con el personal, no sean sólo los y las deportistos y deportistas los que paguen el pato. Ea, desde aquí lo propongo como idea, que alguien recoja firmas para recoger eso en nuestro código penal también, porque no es justo que ellos nunca tengan responsabilidad alguna en lo que hacen mal.

Entonces sí que habría escándalos de verdad en los noticiarios y no ese linchamiento público de mitos caídos por usar sustancias controladas sin permiso de los controladores… y no sigamos por ahí que si no, esto no levanta el vuelo.

Lo dicho, como notarán estoy malísimo, así que voy a doparme un poco este resfriado de tres pares de semiconductores. Cuídense y  no se les ocurra hacer nada descontrolado.