Vengo diciéndolo de una forma u otra desde que empezamos a charlar. Dios inventó el tiempo y nosotros hemos inventado la prisa, como dice Martín Valverde. Y el tiempo existe porque existe el movimiento. Y el movimiento es cambiar.
Se acerca la primavera. Sevilla, como una sevillana de atronadora belleza comienza a perfumarse de incienso y primavera. Las estaciones, al contrario que nosotros, no se impacientan, van a su ritmo cadente de soles y de lluvias, pero siempre llegan. Como llegan siempre las edades de los hombres, de las mujeres y de los pueblos. Los que vamos de reata somos nosotros pero los cambios nos pasan por lo alto y nos aplastan con su irremediable terquedad.
Sevilla ya está cambiando una vez más aunque hubiéramos pensado que esto iba a durar siempre. Nada dura siempre. Conoceremos nuevos soles y nuevos amores. Votaremos nuevas alcaldías. Oiremos voces nuevas en las ondas…
España va a cambiar, y va a cambiar porque esto no es soportable y comenzaremos a escarbar hacia arriba a dentelladas secas y calientes. Se nos habla de que Don Alfonso Guerra puede optar al consistorio, para que no nos conozca ni la madre que nos parió. Sería una manera de cambiarlo todo para que no cambie nada… hasta que volvamos a necesitar un cambio.
Aquel eslogan, ¿recuerdan? fue un gran eslogan y llevó a Don Felipe González a la Moncloa. Por el cambio. Los cambios no es que sean buenos ni malos. No son necesarios ni superfluos. Son inevitables. Son la manera que tiene El Gran Poder de asesorarnos y cuidarnos.
Cambio y movimiento. Nerviosismo y esperanzas. El mundo va a mejor a pesar de las quejas porque cambiamos. De la Edad Media y la dictadura hemos llegado a una nueva primavera en Sevilla. La madre que parió a Sevilla si la conoce bien y nos conoce a todos. Nos cambiará una vez más, porque Sevilla y nosotros hemos nacido de la gran madre. Del tiempo en movimiento. De la belleza que no se conforma y no se detiene. Por cierto, estoy así porque hoy firmo uno más de los cambios de mi vida. Mañana cumplo 42 años, San Patricio. Felicidades Patri… y ya saben, quería compartirlo con ustedes.
No comments:
Post a Comment