El sábado España entera estaba pendiente del lío del PSOE en la Comunidad de Madrid. También había primarias en Murcia, pero eso ha interesado mucho menos por aquello de la ausencia de morbo. Al final ha ganado Tomás Gómez, quien ha vencido a Trinidad Jiménez en razón a… bueno no sé qué de diferente habría en sus programas, así que ha vencido por… pues no sabría decirles, pero ha vencido el PSOE derrotando al… PSOE. Qué cosas pasan.
El argumento que yo le oía a doña Trinidad era que ella debía ganar porque tenía más posibilidades de ganarle a Doña Esperanza y don Tomás Gómez acabó su discurso diciendo que con él nace una nueva Esperanza. Les confieso que estoy menos orientado que un cangrejo en un cubo. En fin. Que ha ganado el SOE. Espero al menos, que nadie del gobierno vuelva a intentar rebatir un argumento de nadie diciendo que es electoralista, pues eso sí que he sacado en claro de doña Trinidad: que su elección hubiera sido mejor por ser más electoralista. Joder, mejor lo dejamos.
Bueno, pues les intentaba decir antes de enredarme, que el sábado estuvo aquí el presidente del gobierno con nuestro presidente Griñán, quien se permitió el lujo de decir que el SOE andaluz, donde por cierto no ha habido primarias de ningún tipo de tipo ni de tipa, era el partido del futuro y del cambio. ¡Del cambio, sí! Pueden llevarse las manos a la cabeza si lo desean. Les juro que me gustaría en ocasiones ser capaz de decir semejantes sandeces y quedarme además tan pancho y tan ufano como si de verdad hubiera dicho algo que fuera producto de la inteligencia, la reflexión y la honestidad. ¿ Se imaginan poder hablar con ese desahogo a la pareja, al jefe, a los hijos, padres o compañeros y compañeras de trabajo? Sí, es cierto, nunca he hecho nada pero saben ustedes que soy el que más hace y el que lo hace mejor. Te he arruinado, es cierto, pero confía tus ahorros a mis gestiones, que soy la promesa del éxito. Siempre llego tarde, es cierto, pero confíe en mí, siempre llego a tiempo. Sí hijo, te lo prometí, pero te prometo que la próxima vez será distinto…
Menos mal que Griñán le agradeció su trabajo a nuestro Monteseirín y que dijo que confiaba en Andalucía. Esperemos que Andalucía responda como ha respondido Madrid. Que haciendo uso de su soberana voluntad, la próxima vez que le den a elegir no elija más de lo mismo y opte por el cambio…
Creo que ya me estoy liando otra vez.
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